Herencias que matan

Por Rubén Ordóñez Ortega.

Por años he sido crítico del mal comienzo, del pésimo manejo y de la lánguida agonía de Biorgánicos del Sur, la empresa que maneja los residuos sólidos de los municipios surhuilenses, que fue constituida por el alcalde Ramiro Falla Cuenca, luego de un viaje a Alemania donde le ofrecieron una maquinaria obsoleta que necesitaban vender con la que trataban las basuras europeas que son de muy distinta naturaleza y contextura de las nuestras. Y para comprarla acudió a créditos bancarios de 700 millones de pesos de ese tiempo, con cuya carga nació muerta. Hoy debe más de 2.700 millones de pesos, según he oído por radio. Hace unos meses cuando me refería nuevamente al tema, se me dijo que la cosa iba a solucionar con unas gestiones que estaban haciendo y con la participación de las Empresas Públicas que les iba a vender un lote para unas celdas que se le exigían y con el pago de las deudas y aportes debidos por los municipios socios.

Fueron paños de agua tibia para un mal sistémico y será cerrada la empresa y la recolección de basuras, como ya lo fue una empresa similar en Garzón que siguió el mal ejemplo de ex alcalde Falla Cuenca, quien ahora dirige la educación del municipio de Neiva como secretario, espero que con mejor fortuna y tino.

Las Empresas Públicas Municipales deberán asumir la recolección y tratamiento de nuestras basuras y residuos, con un sitio de tratamiento a cielo abierto, técnicamente adecuado para el manejo de lixiviados, vidrios, plásticos, cartones y papeles. Y debe montar una infraestructura contra el reloj y a notables costos. Será difícil el cometido, pero ha que asumirlo. Darle respiración boca a boca a la moribunda Biorgánicos es tarea de bobos. Esas son las herencias que matan.

Por años he sido crítico del mal comienzo, del pésimo manejo y de la lánguida agonía de Biorgánicos del Sur, la empresa que maneja los residuos sólidos de los municipios surhuilenses, que fue constituida por el alcalde Ramiro Falla Cuenca, luego de un viaje a Alemania donde le ofrecieron una maquinaria obsoleta que necesitaban vender con la que trataban las basuras europeas que son de muy distinta naturaleza y contextura de las nuestras. Y para comprarla acudió a créditos bancarios de 700 millones de pesos de ese tiempo, con cuya carga nació muerta. Hoy debe más de 2.700 millones de pesos, según he oído por radio. Hace unos meses cuando me refería nuevamente al tema, se me dijo que la cosa iba a solucionar con unas gestiones que estaban haciendo y con la participación de las Empresas Públicas que les iba a vender un lote para unas celdas que se le exigían y con el pago de las deudas y aportes debidos por los municipios socios.

Fueron paños de agua tibia para un mal sistémico y será cerrada la empresa y la recolección de basuras, como ya lo fue una empresa similar en Garzón que siguió el mal ejemplo de ex alcalde Falla Cuenca, quien ahora dirige la educación del municipio de Neiva como secretario, espero que con mejor fortuna y tino.

Las Empresas Públicas Municipales deberán asumir la recolección y tratamiento de nuestras basuras y residuos, con un sitio de tratamiento a cielo abierto, técnicamente adecuado para el manejo de lixiviados, vidrios, plásticos, cartones y papeles. Y debe montar una infraestructura contra el reloj y a notables costos. Será difícil el cometido, pero ha que asumirlo. Darle respiración boca a boca a la moribunda Biorgánicos es tarea de bobos. Esas son las herencias que matan.

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