Revista la Región

Una filtración de aguas negras del alcantarillado que cruzaba por el centro de la vivienda, derrumbó la estructura y por poco causa una tragedia a la familia de Angel Antonio Claros, en el barrio Villa del Prado. La vivienda construida en bareque en cercanías al barrio El Porvenir, limítrofe con la quebrada de Cálamo, se vino a pique hacia las cinco de la mañana, cuando la familia dormía, alcanzando a ser evacuada. “Me di cuenta que algo sonaba, como un temblor, y fue cuando observé que la casa se estaba deslizando, dándome a la tarea de sacar a mis seis hijos y a mi mujer, poniéndonos a salvo. Los enseres y todo se fue en derrumbe y quedamos totalmente en la miseria”, dijo Antonio Claros. La comunidad estaba colaborando con pequeñas donaciones para conseguir algo de comida, ropa y frazadas, así como un albergue. Tanto la vivienda de Antonio Claros, como la de Teresa Tique, que también sufrió graves averías, están en zona de alto riesgo, dijo el Cuerpo de Bomberos, que pidió al Comité