Revista la Región

Los cerca de 700 ocupantes del predio La Cabaña en el sector de Santo Rosa, deben desalojar voluntariamente el lugar antes de las 8 de la mañana de este martes. Caso contrario, intervendrá la fuerza pública, anunció la alcaldesa Gladis Canacué Medina, que ayer, acompañada de sus secretarios y del Personero Municipal,visitó el lugar. La alcaldesa en la noche del lunes concretó una entrevista este miércoles en Bogotá con el gerente general de Incoder, Rodolfo Campo Soto, para buscar una salida al conflicto. El predio la Cabaña es una finca expropiada al confeso narcotraficante Leonidas Vargas, y la dirección Nacional de Estupefacientes la entregó a Incoder para adelantar un proyecto productivo con 8 familias de desplazados que fueron previamente seleccionados. Las condiciones infrahumanas a las que los invasores han sometido a niños, ancianos y mujeres embarazadas es lamentable. Con esta actitud pretenden hacerse fuertes y evitar la acción de las autoridades en el proceso de desalojo, de

En los últimos meses se ha incrementado el índice de accidentes de tránsito, especialmente de motociclistas, que dejan saldos trágicos y de heridos. Para las autoridades de policía, este flagelo se da por la falta de observación de las normas de tránsito, el conducir en estado de embriaguez, y en el aparentar pericia a bordo de las motos o de los automotores. Con el propósito de prevenir los accidentes en Pitalito, las autoridades de tránsito han dispuesto medidas especiales, como el requerimiento permanente por parte de la policía, de documentos, verificación del estado psicológico de los conductores, las pruebas de alcoholimetría, que ha dejado buenos resultados, en el sentido de haber sorprendido a los guías de vehículos y velomotores en estado de alicoramiento.

Desde hace 7 años, doña Ruth Argote, madre del sargento Arbey Delagado Argote, secuestrado en Miraflores Guaviare, por las Farc, está eperando la liberación de su hijo. Hace 4 años recibió la última prueba de supervivencia de su hijo. En esa ocasión le envió desde las montañas donde estaba cautivo, cartas escritas en servilletas, poemas hojas de cuaderno y noticias, donde le manifestaba que se encontraba al lado del entonces teniente Juan Carlos Bermeo Covaleda. De esa época a hoy ha perdido todo contacto. Cuando los diálogos y el despeje de San Vicente del Caguán, viajó con la ilusión de tener más noticias de su hijo, pero la guerrilla siempre le mintió y nunca le permitió una nueva comunicación. Transcurrido todo este tiempo, hoy abriga la esperanza de que el presidente Alvaro Uribe, formalice el Acuerdo Humanitario, como único medio de lograr la liberación de todos los secuestrados. Para doña Ruth Argote, todo este tiempo ha sido un suplicio, que no sabe cuando va a terminar.

La Asociación Municipal de Juntas Comunales celebró el segundo mercado campesino correspondiente al presente año. El evento, como de costumbre se lleva a cabo en las instalaciones de la sede comunal "Gloria Lara de Echeverri", y esta vez participaron cerca de 50 productores, provenientes de las veredas y corregimientos del municipio de Pitalito. Para los organizadores de este mercado, poco a poco se va consolidando la iniciativa que tiene el apoyo de las organizaciones comunales veredales. El próximo mercado tendrá lugar el día 30 de marzo, cuando esperan reunir a un número mayor al que participó en su última versión.

Una filtración de aguas negras del alcantarillado que cruzaba por el centro de la vivienda, derrumbó la estructura y por poco causa una tragedia a la familia de Angel Antonio Claros, en el barrio Villa del Prado. La vivienda construida en bareque en cercanías al barrio El Porvenir, limítrofe con la quebrada de Cálamo, se vino a pique hacia las cinco de la mañana, cuando la familia dormía, alcanzando a ser evacuada. “Me di cuenta que algo sonaba, como un temblor, y fue cuando observé que la casa se estaba deslizando, dándome a la tarea de sacar a mis seis hijos y a mi mujer, poniéndonos a salvo. Los enseres y todo se fue en derrumbe y quedamos totalmente en la miseria”, dijo Antonio Claros. La comunidad estaba colaborando con pequeñas donaciones para conseguir algo de comida, ropa y frazadas, así como un albergue. Tanto la vivienda de Antonio Claros, como la de Teresa Tique, que también sufrió graves averías, están en zona de alto riesgo, dijo el Cuerpo de Bomberos, que pidió al Comité