BANCO DE ALIMENTOS EN PITALITO
Con la participación inicial de 20 personas fue constituido en Pitalito el Banco diocesano de Alimentos, bajo la tutela de la Iglesia Católica.
Como una de las primeras actividades luego de la convocatoria fue la aprobación de los Estatutos que regirán la fundación encargada de regentar el banco, la designación de la junta directiva y las acciones a desarrollar en lo sucesivo.
Monseñor Rigoberto Corredor Bermúdez, obispo de la Diócesis de Garzón, elegido presidente de la junta, dijo que se ha conformado el banco de alimentos, con el fin de apoyar a las personas de escasos recursos económicos, aquellas que tienen dificultades para su subsistencia, lo que hará previa una identificación mediante encuesta que realiza cada una de las parroquias.
Señaló que este proceso va dirigido a "personas vulnerables que no son desplazadas, sino que están padeciendo una situación terrible por falta de alimentos, identificarlos como se está haciendo a través de las parroquias para prestarles ayuda inmediata, y esto implica que los comerciantes, empresarios y gentes de buena voluntad se vinculen con sus aportes".
Hizo un llamado al gremio de comerciantes de Pitalito para se vinculen como socios aportantes del banco de alimentos, que inicialmente tendrá una población para ayudar de 200 personas de los barrios más críticos en material social de la ciudad de Pitalito.
La sede inicial de la Fundación será en la parroquia del Divino Niño, donde han sido ofrecidos dos locales con alguna comodidad para el acopio de las ayudas y su distribución.
La alcaldía de Pitalito se vinculó a esta iniciativa con un aporte de siete millones de pesos, destinados al pago de secretaria de la fundación, anunció la alcaldesa Gladis Canacué Medina.
El siguiente paso, una vez fueron aprobados los Estatutos, es la expedición del decreto diocesano por parte del Obispo, reconociendo la existencia de la fundación, entra tanto que el municipio a través de la alcaldía hará el reconocimiento de la personería jurídica a la institución.
La Junta Directiva de la Fundación Banco Diocesano de Alimentos de Pitaito, quedó integrada por Monseñor Rigoberto Corredor Bermúdez, presidente, el Vicario de San Antonio, Héctor Trujillo, la Pastoral Social de la Diócesis, en cabeza del sacerdote Daniel Rojas, el representante los párrocos, Héctor Valencia, y tres representantes de la comunidad de Laicos de la Iglesia en Pitalito.
Como una de las primeras actividades luego de la convocatoria fue la aprobación de los Estatutos que regirán la fundación encargada de regentar el banco, la designación de la junta directiva y las acciones a desarrollar en lo sucesivo.
Monseñor Rigoberto Corredor Bermúdez, obispo de la Diócesis de Garzón, elegido presidente de la junta, dijo que se ha conformado el banco de alimentos, con el fin de apoyar a las personas de escasos recursos económicos, aquellas que tienen dificultades para su subsistencia, lo que hará previa una identificación mediante encuesta que realiza cada una de las parroquias.
Señaló que este proceso va dirigido a "personas vulnerables que no son desplazadas, sino que están padeciendo una situación terrible por falta de alimentos, identificarlos como se está haciendo a través de las parroquias para prestarles ayuda inmediata, y esto implica que los comerciantes, empresarios y gentes de buena voluntad se vinculen con sus aportes".
Llamó al gremio de comerciantes para que se vinculen como socios aportantes del banco de alimentos, que inicialmente tendrá una población para ayudar de 200 personas de los barrios más críticos en material social de la ciudad de Pitalito.
Hizo un llamado al gremio de comerciantes de Pitalito para se vinculen como socios aportantes del banco de alimentos, que inicialmente tendrá una población para ayudar de 200 personas de los barrios más críticos en material social de la ciudad de Pitalito.
La sede inicial de la Fundación será en la parroquia del Divino Niño, donde han sido ofrecidos dos locales con alguna comodidad para el acopio de las ayudas y su distribución.
La alcaldía de Pitalito se vinculó a esta iniciativa con un aporte de siete millones de pesos, destinados al pago de secretaria de la fundación, anunció la alcaldesa Gladis Canacué Medina.
El siguiente paso, una vez fueron aprobados los Estatutos, es la expedición del decreto diocesano por parte del Obispo, reconociendo la existencia de la fundación, entra tanto que el municipio a través de la alcaldía hará el reconocimiento de la personería jurídica a la institución.
La Junta Directiva de la Fundación Banco Diocesano de Alimentos de Pitaito, quedó integrada por Monseñor Rigoberto Corredor Bermúdez, presidente, el Vicario de San Antonio, Héctor Trujillo, la Pastoral Social de la Diócesis, en cabeza del sacerdote Daniel Rojas, el representante los párrocos, Héctor Valencia, y tres representantes de la comunidad de Laicos de la Iglesia en Pitalito.
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