Ni con mariachi
Por más que lo que han intentado sus amigos y allegados arrancarle una sonrisa, ha sido imposible. El capitán Juan Carlos Bermeo Covaleda permanece firme en no mostrarle simpatía a nadie. El viernes fue objeto de un caluroso homenaje ofrecido por el colegio Departamental, de donde es egresado. Escuchó una serenata y un mariachi, y su rostro permaneció así.